lunes, 24 de septiembre de 2007

¿Y la llorona , el sombreron y demas compinches?

Mi abuela vivió su niñez en una finca situada en Cocales , Escuintla. Las personas de la tercera edad , sabrán que en su época no existía mucha tecnología. Los niños no eran esclavos de la televisión y del Internet y solían divertirse en la naturaleza jugando a las escondidas, la tenta y otros juegos populares. La imaginación tenía más espacio. En aquellos tiempos también solían contar muchos relatos, entre estos las leyendas.

Se hablaba del sombrerón y de la llorona, los mas famosos del clan, pero también existían los penitentes de la recolección, el cadejo, el carruaje de la muerte, etc...

Mi abuela contaba, que en la finca, los caballos amanecieron varias veces con trensas. Decía que eran duras como si las hubiesen unido con gelatina. Esto según ella era obra del sombrerón. Este era un picaro hombrecito de 50 centimetros de estatura que solía enamorar a las mujeres con sus cantos y piropos. Se cuenta que todas las mujeres caían en su hechizo. Mi papa, quien vivió su infancia en Mazatenango cuenta exactamente la misma historia. Se decía incluso, que el sujeto dejaba huellas pequeñas en el fango, incluso hubo un rumor de una señora embarazada de un hijo de el. Mi tío claro es más fanfarrón que cualquiera, pero el jura y perjura haber visto a la llorona en las orillas del río Motagua. Una mujer con el pelo largo y negro profundo, lacio y brillante, con cuerpo esbelto y vestida con mantos blancos sucios. también contaba que el cadejo ,un perro con ojos rojos, negro mugriento, callejero, gruñon y con mirada diabólica, siempre lo siguió en sus borracheras, según el el cadejo castigaba a los ebrios.

Y asi también oigo al amigo de un amigo del tio del sobrino del vecino, contar las mismas historias. Las hay incluso mixtas, de el diablo con la llorona, los penitentes con el sombrerón, el diablo solito, la llorona versus la ciguanaba, etc..

La pregunta es la siguiente ¿Que paso con ellos
Antes se les encontraba desde Mazate, la zona 1, la Antigua,Escuintla, Parramos. ¿Y ahora?
¿Acaso se mudaron de locación?
Pues claro, con tanta tecnología los niños ya no tienen ni chance de asustarse. Estos seres viven del temor de las personas pero la oferta esta por los suelos. Como quieren las personas que la imaginación trabaje cuando todo se nos esta siendo servido . La juventud de ahora se dedica plenamente a la tecnología. prefieren jugar en realidad virtual que en realidad propia. Imaginense a un niño viendo televisión al mismo tiempo en que oye música y chatea por el Internet, creen ustedes que le pondría coco a los gritos de la llorona? Pues claro que no, por eso la pobre se ha de haber ido a otro lugar buscando un poco de atención. Lo mismo le paso al sombrerón y a sus otros compañeros. Aquí para ellos ya no quedó mas oficio. Si quieres revivirlos, activa tu imaginación y pronto volverán a ponerte la piel de gallina.